La novela de Patrick Deville Peste y cólera me ha interesado. Nunca oí hablar de Yersin y verdaderamente merece mucha más visibilidad . Un hombre curioso, ansioso de conocimiento, coleccionista de saberes prácticos, reacio y condescendiente con las artes (literatura, escultura)
Abandonó una carrera éxito profesional en Francia porque prefirió la aventura, la libertad y también la soledad.
La novela no se desarrolla linealmente. Acompañamos a Yersin en su último viaje , desde París hasta Vietnam. La Segunda Guerra Mundial ha comenzado y la vida de protagonista se acaba. Morirá en 1943. La novela nos permite seguir al fantasma del futuro que viaja con el microbiólogo, explorador, horticultor, ingeniero...
El autor establece paralelismo entre el indómito Yersin y el poea Rimbaud. Ambos ajenos a las normas, rebeldes, enfermos de conocimientos nuevos y estimulantes.
Me ha conmovido que Yersin dedicara el final de su vida intelectual a la lectura y traducción de autores clásicos griegos y latinos.
Octogenario, Yersin reanuda el studio del altín y del griego, tapando página izquierda (...)
Fedro y Virgilio, Horacio, Salustio, Cicerón, Platón y Demóstenes. Sin duda Yersin ve en ellos valores antiguos que fueron los suyos, la simplicidad y la rectitud, la calma y la mesura. Ahora siente el placer de la literatura y como siempre, el de la soledad.